pues no se yo lo que contare por aqui,seguro que habra cosas que seran creibles o no,pero......ah!

lunes, 16 de enero de 2012

De Comunión y Revolución

Sí,por fin llegó el día;muy ilusionada como todos los niños,con mi peinadito semirecogido y con el pelo largo y lasio,que ya sabéis que lo mío no es eso,pero mi madre esperando el evento,ya un año antes me lo dejó crecer.Obra de arte del peluquero Marcelino,famoso por esos años y muy guapito,pero quien, se pasó tooooooda la tarde esperando y en el secador fui yo,claro,con total aburrimiento e impaciencia;pero ya conseguido lo esperado,a seguir sacrificándose un poco más para que el peinado estuviera bien,un sueño con cuerpo inmovilizado.La ceremonia estuvo bien,que yo recuerde,y la celebración nada apoteósica,familiar más bien;así que a partir de aquí ya podia comulgar,pero lo que más me ponia nerviosa era el acto previo(confesión),se me ponia mariposillas en el estómago,sudores,la barriga mala.....ojú!¿me reconocería el cura,que yo era la que le confesé un dia,que le dije tonta a mi madre,le dije una mentira,o que dije una palabrota un dia de esos que tiene una malo?....vaya paciencia tendría el pobre con todos nosotros.Debo decir que a mi me gustaba leer la vida de los santos y me distraía leyendo la obra y milagors de algunos;a mí me gustaba San Martín de Porres,San Francisco de Asis y Santa Rosa de Lima.Teníamos costumbre todas las amigas vecinas de asisitr a nuestra cita dominical al Panteón de Marinos Ilustres a las 9.45 con nuestros vestiditos guardados toda la semana para ese día !que peinaditas íbamos todas!,nos gustaba de ir porque allí se daba la misa para todos los alumnos del año en curso y marinería en general y al final cantábamos la Salve Marinera;posteriormente nos quedábamos a curiosear las estátuas y pinturas que allí había y el guía,ya muy mayor,nos explicaba las batallas ,de algún General u otro personaje de la vida histórica militar de España,nos enseñaba la sala de armas y medallas,y todo eso nos gustaba mucho,pero el pobre no se como tenía paciencia para atendernos tantas veces;pudiera ser que como era mayor se distraía con nosotras.Esa costumbre se acabó cuando se jubiló,así que cambiamos de Iglesia,y nos fuimos a la del Cristo,cerquita también de casa.Ya corría otros tiempos y yo decidí que quería ir vestida de otra forma a misa,así que me atreví a  dejar el velo,la falda y los zapatos con calcetines y me planté con pantalón pitillo color burdeos y sueter blanco.Allá fuimos mi hermana y yo,como de gemelas se tratara(me lleva tres años más); !oh! que barbaridad,esas caras revolviéndose ,y los corrillos en el banquillo,no tenía vuelta de hoja,había que seguir palante.........pero os aseguro que a partir de ahí ,los pantalones en misa ya se íban apoderando de la vestimenta dominical.pues eso.

2 comentarios:

  1. mira mira mira lo que voy descubriendo, la que me hizo cambiar los vaqueros, tenis, una coleta y camiseta blanca para ir al 8ºde Egb y ponerme falda y pelo suelto porque decía que las niñas no iban así vestidas a clase............de lo que se entera una oye.....

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  2. ja,ja,ja ,ja...pero hija es que tú no ibas con velo agarrado con una horquilla!

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